La Logística en España debe afrontar grandes retos, en lo particular considero que las empresas deben hacer un esfuerzo en evolucionar conceptualmente, la evolución de base de trabajar por departamentos a trabajar de forma mixta por departamentos y por procesos hasta trabajar por procesos.
La potenciación de la figura del operador logístico, para poder aprovechar su tecnología, para variabilizar el coste, la implantación en las empresas no solo del concepto de la logística integral sino la figura del logístic@ integral, y la difícil figura del Supply Chain managemet, evidentemente las grandes empresas Españolas implantadas a nivel global: Inditex entre otras van a la vanguardia en este sentido generando estructuras que se adaptan al mercado, se están haciendo esfuerzos y el foco y la energía de los gestores debe orientarse en estas nueve lineas propuestas por la fundación ICIL.
1.-
Gestión del transporte en la “última milla”.
La congestión del tráfico
sigue aumentando en los grandes núcleos urbanos españoles (Madrid y Barcelona
principalmente), con un efecto directo sobre la distribución urbana, al
coincidir las horas puntas de tráfico con el horario habitual del reparto.
Según un estudio de la DGT, el 50% de la distribución urbana en Madrid se
realiza entre las 8h y las 12h de la mañana, un horario que “dificulta su
operativa” de la cadena de suministro, según concluyó el 73% de los asistentes
del último congreso de AECOC vinculado a esta cuestión.
2.-
Fomentar la Estrategia 4R (Reducir, Reciclar, Reutilizar y Recuperar).
Una de las bases para alcanzar
un modelo más sostenible pasa, sin duda, por la utilización de materiales
reciclables y reutilizables a lo largo de toda la cadena de suministro. En esta
línea, destacan iniciativas empresariales como la de Mahou-San Miguel, que ha
desarrollado en colaboración con DW Plastics un innovador palet de plástico
reciclado para suministrar sus cajas al canal Horeca. Su uso permitirá la
generación de un 84% menos de CO2 y la reducción del impacto del uso de masa
forestal, además de tratarse de un material reutilizable.
3.-
Capacidad de respuesta ante las nuevas exigencias del consumidor.
El perfil del consumidor ha
cambiado, sus patrones de comportamiento ya no son fácilmente predecibles. Las
compañías se enfrentan a una mayor exigencia por parte del cliente, en gran
medida como consecuencia de la gran cantidad de información de que dispone y
que influye en su decisión de compra. Ello, junto a una menor fidelidad del
consumidor hacia los productos y las marcas, obliga a las empresas a entender
en profundidad qué necesidades tiene su público y a responder ante ellas.
4.-
Aportar valor.
En relación con el punto
anterior, la cadena de suministro debe estar enfocada a aportar valor a la
compañía de forma sostenible en el tiempo. Antes de diseñar la supply chain, su
funcionamiento y organización, es necesario conocer al consumidor y sus
demandas. Además, en un contexto en el que el ciclo de vida de los productos es
mucho más corto y que hay más variedad de opciones que antaño, la necesidad de
diferenciarse de la competencia también cobra peso a la hora de gestionar la
cadena de suministro.
5.-
La potenciación de transportes más sostenibles.
España, tanto por razones
geográficas como históricas, presenta aún un déficit significativo del
transporte ferroviario respecto al realizado por carretera. Según datos del
Ministerio de Fomento, el transporte por carretera nacional ha gestionado un
total de 1.137 millones de toneladas en 2014 frente a solo 24 millones de
toneladas gestionadas por ferrocarril. En este sentido, el país está dando sus
primeros pasos de mejora con su participación en el proyecto europeo TEN-T, que
tiene como objetivo la creación de corredores ferroviarios en toda Europa.
6.-
Utilización de vehículos más eficientes.
Este capítulo es prioritario
para las grandes compañías a nivel mundial. Así, FedEx destaca la obtención de
su objetivo de aumentar la eficiencia de combustible de los vehículos en un
30%, gracias a una reducción de kilometraje mediante la optimización de rutas y
la inclusión de vehículos más eficientes y alternativos en la flota. A nivel
institucional, el Gobierno ha impulsado iniciativas como el Plan PIMA
Transporte Financiación, que prevé una dotación inicial de 600 millones de
euros de apoyo financiero para impulsar la renovación de las flotas de
transporte.
7.-
Potenciación de certificaciones en medioambiente.
La ecoetiqueta europea evalúa
los efectos medioambientales de un producto a lo largo de su ciclo de vida:
consumo de materias primas, producción, distribución, utilización y desecho. Se
otorga a los productos que garantizan un alto nivel de protección ambiental,
siguiendo criterios unificados y válidos para todos los Estados miembros de la
Comunidad Europea.
8.-
Adaptabilidad y coordinación.
Si las funciones de las áreas
de logística de las compañías continúan evolucionado, resultará fundamental que
sean capaces de adaptarse de forma rápida a los nuevos comportamientos del
mercado y a las demandas de sus consumidores.
9.-
Creación de sinergias.
La función logística ha dejado
de ser un departamento estanco, por lo que cobra relevancia la coordinación de
los departamentos de logística con otras áreas, como pueden ser las de
marketing o ventas. Asimismo, es indispensable la comunicación entre compañías
e instituciones, pues es justamente la administración la responsable del
desarrollo de la legislación y las infraestructuras necesarias para la
consecución de los cambios que busca el mundo privado.
Fuente: Fundación ICIL, Abril 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario